Aquellas empresas que manejan sustancias químicas líquidas, requieren elementos que les permita agilizar sus actividades laborales sin comprometer la integridad del área de trabajo. Es en este sentido en el que surgen las tarimas antiderrames, debido a su capacidad y eficiencia permiten controlar los accidentes y cumplir con las regulaciones de seguridad de cada empresa. Las tarimas son esenciales en la gestión de líquidos, pero su desempeño no se obtiene solo de este producto, el buen manejo y uso que se les dé mejora la seguridad laboral.
¿Para qué se usan las tarimas antiderrames?
Las tarimas antiderrames tiene aplicaciones en diversas industrias químicas que manejan productos diversos, permiten gestionar las actividades de mezcla, transferencia y transporte de los contenedores en plantas o almacenes. Pueden ayudar a almacenar productos químicos o servir en las plantas de producción. Las tarimas funcionan de manera práctica: permiten cargar determinado número de contenedores sobre ellas para su trabajo posterior, en caso de existir derrame, la tarima lo almacena evitando así que caiga al suelo.
Capacitación para usar tarimas antiderrames
Para asegurar ambientes de trabajo controlados, el personal que maneja las tarimas debe saber cómo manipularlas correctamente. Para ello, la capacitación debe poder cubrir a detalle los diferentes tipos de tarimas que existen y sus limitaciones. Una vez establecido este paso, se enseña de manera visual y con ejemplos como se colocan los contenedores en las tarimas, la forma en que se aseguran y las inspecciones que se deben realizar antes y después de usarlas.
La capacitación también debe poder cubrir simulacros que aborden los diferentes riesgos que pueden ocurrir al manejar las tarimas, de tal forma que el personal pueda realizar las acciones más seguras y adecuadas sin comprometer su integridad o la de las personas alrededor.
¿Por qué es importante?
Una capacitación adecuada ayuda a prevenir accidentes laborales, evita que haya riesgos de contaminación del suelo y agua ante derrames químicos. Además, se ve una mejora en la eficiencia de las actividades laborales, los empleados capacitados realizan acciones seguras y prácticas, lo que reduce el tiempo y los recursos. Por último, como se mencionó antes, con una capacitación completa, las empresas cubren sus normas de seguridad, acordes de cada país.