Las tarimas antiderrames son una herramienta esencial para garantizar la seguridad en el manejo de líquidos en entornos industriales y almacenes, están diseñadas para contener cualquier tipo de líquidos. Utilizar este elemento puede ayudar a prevenir accidentes y cumplir con las normativas, especialmente si se trabaja con líquidos químicos, aceites o combustibles. Sin embargo, ¿es realmente una opción rentable a largo plazo?
Aspectos a considerar para elegir una tarima antiderrame
Al momento de elegir una tarima antiderrame, hay que primero evaluar la capacidad de carga del producto y el peso de nuestros contenedores. Después conocer si los materiales de fabricación y las sustancias de almacenamiento son compatibles entre sí. Antes de adquirir, puedes realizar una comparación de precios y ventajas del producto, considera siempre la calidad y durabilidad antes que los bajos precios. Las tarimas antiderrames no solo requieren una resistencia a los líquidos, también deben ser resistentes a los rayos UV o a los cambios de temperatura.
¿Es rentable invertir en tarimas?
La respuesta a esta pregunta es sí, de hecho invertir en tarimas antiderrames es una decisión inteligente, pues se consideran opción rentable a largo plazo. Las tarimas reducen el riesgo de accidentes laborales, lo que se traduce en menos costos por accidentes o seguros. También evitan daños a equipos o maquinaria afectada por corrosión o contaminación, reduciendo costos importantes en reemplazos.
Otro factor relevante es que al contener derrames, se evita la contaminación del suelo y el agua, lo que evita pagos por multas y sanciones, así como los procesos de remediación. De igual manera, se reducen los tiempos dedicados a la limpieza de derrames y se minimizan las interrupciones en las operaciones de almacenes, lo que impacta positivamente en la eficiencia laboral.
Cómo evaluar la rentabilidad
Al momento de elegir las tarimas, considera el costo por adquisición, instalación y mantenimiento de las tarimas. Evalúa los ahorros que obtendrás a largo plazo gracias a la prevención de accidentes y los beneficios intangibles que puedes obtener como empresa, es decir, como mejora tu imagen y la satisfacción de tus empleados. Una inversión inicial en tarimas antiderrames puede parecer elevada; sin embargo, sus beneficios a largo plazo superan ese costo y garantizan un retorno de inversión significativo.
